Hoy nadie duda que el movimiento feminista ha llegado a todos los ámbitos, ha sido muy notable en la literatura por ejemplo a través de algunos títulos como Mamá quiero ser feminista (Carmen G. de la Cueva), Los hombres me explican cosas (Rebecca Solnit) , Un libro para ellas (Bridget Christie) , ……y como era de esperar ha llegado a otros ámbitos como el marketing y dos grande ejemplos de cómo ha llegado lo encontramos en la moda y en la publicidad.
Con esta llegada, que no es nueva, ya en décadas anteriores se encuentran vestigios del uso de mensajes feministas en algunas marcas, se ha puesto el foco de atención en la responsabilidad del marketing como un agente capaz de convertir una corriente social en algo puramente mercantilista.
En el caso de la moda, del que vamos a hablar hoy en el blog de Harca Marketing Sostenible, las frases feministas están llenado nuestras ropas, especialmente las camisetas y la pregunta que nos hacemos es ¿este hecho resulta beneficioso para el movimiento feminista, para la sociedad en su conjunto o sólo para las marcas?
Lo que está claro es que cuando las marcas visibilizan estos mensajes hacen en mayor o menor medida que lleguen a más personas, que se hablen de ellos y que circulen por el debate público. No obstante, a la vez pueden distorsionar los contextos en el que tuvieron lugar las frases y sus significados. Es necesario hablar de feminismo y aclarar aquellas explicaciones que confunden el ser feminista con el querer dominar un sexo sobre otro, el mensaje es claro, la persona feminista aboga por la igualdad entre mujeres y hombres.
Quizás el ejemplo más conocido por ser además uno de los primeros en tener relevancia mediática es la camiseta de DIOR con la frase “We should all be feminists” extraída del libro de la feminista nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie, en el que defiende lo qué significa ser feminista en el siglo XXI. Independientemente de su elevado precio no apto para todos los consumidores, la camiseta de la que se dona una parte de los beneficios a la Fundación Clara Lionel, se ha convertido en una especie de icono elevado por la notoriedad de numerosas mujeres que representan en nuestros días valores como el empoderamiento y la libertad.
Y como era de esperar, otras marcas, en concreto del fast fashion, han elaborado ya sus propios modelos, aunque quizás los más interesante desde el punto de vista del consumo responsable y si tu caso es el de una persona que quiere lucir una de estas camisetas, están empezando a proliferar positivamente las camisetas de diseñadoras independientes que apuestan por la sostenibilidad de sus diseños y a destinar los beneficios de la venta a fundaciones y entidades que trabajan con mujeres en diversas situaciones de vulnerabilidad.
En conclusión, las personas siempre hemos necesitado de vías para expresar nuestras emociones, motivaciones y críticas, y algunas de estas vías se han materializado a través de la propia vestimenta, por eso, quizás este fenómeno de las camisetas con mensajes feministas sea una de esas cosas que las marcas más responsables hacen en pro del desarrollo social, convirtiéndose en receptores de lo que ya existe, de lo que ya sentimos y pedimos que es la igualdad entre las personas y el fin de la violencia y la discriminación contra mujeres y niñas.
Cristina Sanabria Lagar: Soy una cuidadosa y sensible investigadora de la comunicación responsable, social y ética; de la publicidad y el marketing sostenible. Lidero un proyecto en el que defendemos una forma de trabajo que no sólo puede hacer del mundo un lugar mejor, sino también ayudará a diferenciar a tu empresa y elevar su valor.