Hace tan sólo unos días compartíamos con vosotros, a través del blog, nuestra crítica hacía la publicidad sexista. Pues bien, repasando noticias nos hemos encontrado un nuevo ejemplo de publicidad que vulnera los derechos de la mujer.
En este caso, se trata de una campaña de la marca de lencería Victoria’s Secret, en la que las modelos que aparecen, todas caracterizadas por tener cuerpos esbeltos y delgados, están acompañadas por el eslogan “El cuerpo perfecto”. En principio, la firma sólo anuncia un tipo de sujetador más confortable y así lo alega ante las críticas y denuncias, que el anuncio ha despertado en Reino Unido. Y el problema no es el producto que se oferta sino cómo se vende, el eslogan de la compañía parece responder a ese canon de la mujer- modelo, es decir, un solo tipo de mujer, y parece obviar que en el mundo existen muchos más cuerpos de mujer, que quizás estén también interesadas en usar sus productos.
Es lógico pensar que la publicidad necesita materializarse a través de lo agradable, lo bonito, lo bello, pero es que señores creativos, atiendan: lo bello es muy relativo y lo bello se encuentra en muchas más cosas de las que antaño han venido mostrándonos.
No se trata de que los creativos hagan un gran esfuerzo por transformar los patrones hasta ahora utilizados. Se trata de innovación social, responsabilidad y sostenibilidad. Y ojo, con lo que significa innovación social, soy consciente de que siempre tendrán que pensar en su target, pero no propongan estereotipos extremos, porque igual de ofensivo es que encasillen a la mujer como ama de casa y madre, que como una femme fatale que domina a los hombres bajo su erótica exacerbada.
Las mujeres podemos ser muchas cosas, más allá de una descripción sólo física (altas, delgadas, bajas, robustas, morenas, rubias, pelo largo, corto...) hasta súper- mujeres!!!. Hay amas de casa, madres, amigas, empresarias, científicas, deportistas, escritoras, artistas y muchos etcétera y me quedo corta, que además son sensuales, sensibles, inteligentes, increíbles, divertidas y mucho más. Pero es que también hay hombres que son súper hombres (altos, bajos, atléticos, morenos, rubios, con barba, sin ella....), están a nuestro lado, son padres, amigos, empresarios, científicos, sensibles, inteligentes .... ¿se va entiendo a dónde quiero llegar?
Somos personas y como tales, hay una gran diversidad de características que nos hacen a cada uno.
¿Por qué creen que ha tenido tanto éxito la campaña de Dove “Por la belleza real”?
Esta campaña ha abierto un diálogo para las mujeres puedan expresar qué opinan sobre la belleza y anima a escapar de los estereotipos que se promueven desde la comunicación publicitaria.
Últimamente, hemos visto como el discurso por la igualdad ha tomado especial protagonismo en los medios de comunicación. Uno de estos momentos fue en el que la actriz Emma Watson, embajadora de buena voluntad de ONU mujeres, leyó su discurso apelando a la unión de fuerzas entre mujeres y hombres para acabar con la desigualdad.
En el mismo, pidió la movilización de los hombres a través de la campaña HeforShe, recordando que el feminismo es una lucha porque hombres y mujeres tengan los mismos derechos y oportunidades, y que hay que desterrar la idea de que feminismo es sinónimo de odios a los hombres.
Este tipo de iniciativas con gran repercusión, más el esfuerzo de las instituciones, organismos, asociaciones, investigadores, movimientos y de la propia sociedad, suman en la evolución por conseguir esa meta de igualdad. Es verdad que el feminismo se ha venido entendiendo como algo que nace y se hace por las mujeres, pero quedémonos con lo verdaderamente importante, el trabajo por un mundo más justo es cosa de todos, independientemente de dónde seamos, cómo seamos y cuál sea nuestra condición sexual.
Hace poco, se publicó en El País S Moda, un artículo titulado “La difícil tarea de ser hombre y feminista (y no morir en el intento)”. En este artículo explicaban como una revista estadounidense Male Feminist, la cual se lanza ahora en noviembre, parecía estar a la cabeza en cuanto a los hombres que apoyan el feminismo, sin embargo, tras publicar algunas de sus portadas, han dejado claro que lo que quieren es humillar a los hombres que apuestan por la causa.
Afortunadamente, este tipo de hechos quedan postergados cuando pensamos que existen iniciativas como la Asociación española independiente Red de Hombres por la igualdad, que defienden un nuevo modelo de masculinidad alejado del patriarcal y que se sitúe en contra de la discriminación.
Estas nuevas masculinidades y feminidades tienen que encontrar su sitio en la publicidad o más concretamente, la publicidad (entendida dentro de un marketing sustentable) tiene que servirse de los nuevos modelos de hombre y mujer. Hombres y mujeres reales y corrientes que conformamos la sociedad.
Las cosas siempre pueden hacerse mejor y así lo demuestra el Femvertising, corriente que empodera a la mujer en publicidad.
Según un estudio de la web SheKnowsrealizado en Estados Unidos, el tratamiento de la mujer que se hace en publicidad es clave para fidelizar a las posibles consumidoras. Algunos de los resultados (la encuesta no se ha publicado por completo) apuntan que las mujeres encuestadas aseguran comprar marcas que han utilizado representaciones positivas de la mujer en sus anuncios y la inmensa mayoría afirmó que usar a las mujeres como sex symbolsen publicidad es dañino para su género.
Y es que las empresas deben comprender que ser responsable es beneficioso, no sólo para nosotros los consumidores sino también para ellas, ser responsables reporta, y reporta beneficiosos sociales, beneficios económicos y ventajas diferenciales.
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